La pérdida de un ser querido es siempre un momento difícil. Por ello, la ley contempla días de permiso laboral en el que caso de que el fallecido sea un familiar. Este permiso permite ausentarse del trabajo, para poder pasar los inicios del duelo con los más allegados. La norma que regula este permiso está recogida en el Estatuto de los Trabajadores, artículo 37.3:
Art. 37.3 ET “El trabajador, previo aviso y justificación, podrá ausentarse del trabajo, con derecho a remuneración, por algunos de los motivos y por el tiempo siguiente (…)
b) Dos días por el fallecimiento, accidente o enfermedad graves, hospitalización o intervención quirúrgica sin hospitalización que precise reposo domiciliario, de parientes hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad. Cuando con tal motivo el trabajador necesite hacer un desplazamiento al efecto, el plazo será de cuatro días”.

¿En qué casos puede el trabajador acogerse a este derecho?
Los días de permiso solo se conceden cuando se trata de una persona con la que que el trabajador mantiene una relación de hasta segundo grado de consanguinidad. Esto es, padres, hijos, cónyuges, suegros, hermanos, abuelos, nietos o cuñados. En todas estas situaciones, el profesional puede ausentarse tras la correspondiente comunicación a su empresa.
Tal y como detalla la ley, si se da la circunstancia de necesitar un desplazamiento (a otra ciudad, comunidad o país), el permiso pasará de dos a cuatro días. Cabe destacar que éstos comienzan a contar desde el día en el que se produce el fallecimiento.
¿Cómo hay que avisar a la empresa de esta situación?
Ninguna empresa puede negar a sus trabajadores sus días de permiso. Por eso, una vez conocida la noticia, el empleado debe comunicar a su organización lo ocurrido. Es recomendable llevar a cabo esta comunicación de manera escrita, para que quede constancia de ello.

Aunque todas las empresas deben respetar este derecho, son varias las que recogen en sus propios convenios colectivos mejoras a este permiso, ampliándolo a más situaciones o aumentando el número de días del mismo.
En cualquier caso, los días de permiso establecidos por ley serán siempre remunerados, sin alterar el salario del trabajador. Una pequeña ayuda que permitirá al trabajador pasar los días más complicados con sus allegados.