Hay muy pocos sectores que puedan presumir de cifras económicas en el primer semestre del año. El coronavirus ha supuesto un duro mazazo para los beneficios empresariales. El confinamiento redujo de forma drástica el consumo. Y las aseguradoras no han podido mantenerse al margen del impacto negativo de la pandemia.
El volumen estimado de primas para el conjunto del sector, de este modo, se quedó en 29.952 millones entre enero y junio. Una cifra que refleja una caída del 11,1% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Las ramas peor paradas de ese descenso han sido el de automóviles, Vida y Diversos, que se llevan la peor parte con caídas del 2,95%, 1,70% y 26,02% respectivamente. Así lo recogen los datos que ofrece Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA)
Los seguros de decesos resisten
Los datos, no obstante, reflejan que los decesos resisten al caer tan solo un 1%. Este tipo de primas están incluidas en la categoría ‘No vida’, que engloba también otras cuestiones. En su conjunto han caído un 1,70% en los 6 primeros meses del año en comparación con el mismo periodo de 2019.
La categoría ‘resto no vida’, que incluye los seguros de decesos, ha sufrido una bajada de un 1,70%. En concreto, los seguros de decesos han experimentado un descenso del 1%. Algo que afecta al sector funerario, que ha trabajado al límite durante la pandemia.

Cambio de tendencia y frenazo al crecimiento de los decesos
Los datos que ha ofrecido ICEA con respecto al primer semestre suponen un contraste con los resultados que venían ofreciendo los decesos. Porque su volumen de primas creció a lo largo de todo 2019 un 3,5% con respecto del año anterior.
En el informe “El Seguro de Decesos. Estadística Año 2019” se registra que, teniendo en cuenta todas las garantías comercializadas en las pólizas, se alcanzaron los 2.519 millones de euros en todo el país. Una cifra muy importante y que impulsaba con firmeza el crecimiento del sector que se ha estancado en lo que llevamos de 2020.
