El gerente de IDETER repasa en una entrevista con innovaFuneraria los casi 30 años de trayectoria de una de las empresas más consolidadas del sector
No es fácil cumplir 30 años, y mucho menos hacerlo convertida en una de las empresas más competitivas y arraigadas en el sector funerario. IDETER cumplirá en 2024 tres décadas de vida, desde que comenzara como taller de electromecánica en un pequeño pueblo de Jaén hasta el día de hoy, donde más de 20 personas forman esta “gran familia”. Son ellos quienes han conseguido que la empresa llegue a lugares en sus inicios inimaginables, como México, Ecuador, Argelia o Italia.
En esta entrevista su gerente, Francisco Pérez, hace un repaso por los inicios de IDETER, su amplia trayectoria y la estrategia que les ha permitido llegar hasta la posición que hoy ocupan. Entre medias, el presente del sector, las nuevas tendencias, como la cremación de animales, o el futuro que, en clave optimista, dibuja uno de los máximos exponentes de esta compañía.
¿Cómo ha evolucionado IDETER desde su fundación en 1994 a la empresa que hoy en día conocemos?
El próximo año IDETER cumplirá 30 años. Tres décadas en las que tanto el sector como la propia compañía han evolucionado enormemente. IDETER nace como un taller de electromecánica y mantenimiento de hornos industriales, y comienza su andadura con la fabricación de hornos de cerámica, en un entorno propio de gran tradición de industria cerámica (empezando por la propia Arjonilla, que llegó a tener 25 fábricas).
Con el tiempo, ampliamos nuestra paleta de productos, desde la fabricación de hornos de tratamiento térmico de metales a la fabricación de hornos de forjado a fuego en serie. Entonces, y fruto de la combinación de la fortuna de un primer encargo de una asociación protectora de animales, y de la visión de futuro, la empresa apuesta por el inicio de una nueva línea de producción, la de hornos de cremación, que se convertirá en pieza clave y el auténtico estandarte de la estrategia comercial y de expansión de la marca.
¿Cómo fueron esos primeros años iniciándose en la fabricación de hornos de cremación?
La producción de hornos de cremación colectiva de animales adquirió pronto relevancia debido, en primer lugar, a clientes del sector ganadero andaluz y, más tarde, al ámbito nacional. Con una decidida apuesta por la investigación, IDETER comienza el diseño y manufactura del primer horno de cremación de seres humanos para el tanatorio local, lo que supone su entrada en el sector funerario.
Desde entonces, la marca se posiciona poco a poco en los primeros puestos del mercado nacional, desarrollando además sistemas como la filtración de gases de combustión con aplicación directa en cremación, que tiene la particularidad del aprovechamiento del calor residual para valorizar esa temperatura dentro de las instalaciones
Con el tiempo, IDETER va ampliando su paleta de productos. Así, en 2004 se inicia la fabricación de hornos de tratamiento térmico de metales, fabricando hornos de forjado a fuego en serie, con unas tecnologías más simples que en cerámica, lo que permite a la compañía estar preparada técnicamente en un corto espacio de tiempo para esta nueva línea de negocio.
¿Cuál es la infraestructura con la que cuenta actualmente IDETER?
En este sentido, el año 2021 supone un punto de inflexión en la trayectoria de la compañía gracias a la adquisición de las naves que albergan las nuevas instalaciones de IDETER en Arjonilla. Situadas en el polígono industrial del municipio, se suman a las instalaciones previas, con una construcción de 4.500 metros cuadrados, que hacen que hoy contemos con una superficie de más de 15.000 metros cuadrados al servicio de nuestros clientes y un sistema productivo totalmente modernizado.
Y es que en IDETER afrontamos el futuro volcándonos en lo que mejor sabemos hacer, investigar, desarrollar patentes, fabricar, y ofrecer a nuestros clientes la mayor gama de productos y servicios demandados en el mercado nacional e internacional. Todo ello, siempre, apoyando el desarrollo socioeconómico de nuestro entorno y la excelencia, valores compartidos por nuestro equipo de profesionales, que hoy se compone de más de 20 personas.
¿Cómo se está desarrollando la ampliación internacional de IDETER?
Somos una empresa exportadora desde nuestra fundación, y disponemos de instalaciones en funcionamiento no solo en España, también en varios países de Europa (Portugal, Francia, Italia…), África (Marruecos, Argelia, Malí…) y América (Ecuador, México). El desafío internacional hay que abordarlo desde el convencimiento de que no hay crecimiento sostenido sin trabajar mercados exteriores.
Dicho esto, disponemos de personal propio especializado en comercio internacional y agentes que nos representan en los distintos mercados.
¿Qué características técnicas y de diseño distinguen a los hornos IDETER y les dan esa ventaja en el mercado?
La eficiencia de nuestros equipos queda demostrada por el gran número de hornos fabricados en estos 30 años de historia industrial. La eficiencia no solo se refiere al magnifico desempeño de nuestros fabricados en cuanto a calidad, productividad y consumo. Sino que también nos distinguen valores como estar siempre actualizados tecnológicamente, incorporando los sistemas más modernos de control automático, lo que hace que los resultados analíticos en las emisiones a la atmósfera de nuestros hornos son excelentes. Por todo ello, tenemos la confianza de nuestros clientes.
En los últimos meses se habla mucho de la nueva normativa, ¿qué regulaciones deben cumplirse al fabricar y operar hornos crematorios?
Las normativas a aplicar para fabricar hornos de cremación son muy variadas y extensas, y atañen tanto a los equipos eléctricos, mecánicos y de seguridad como los ambientales. De todas ellas, la que más nos ha obligado a estudio y por consiguiente, más satisfacción nos produce en vista de los resultados analíticos de nuestros hornos, es la ambiental.
La principal normativa es la Directiva Europea 2010/75 de emisiones industriales que en España es la ley 34/2007 del 15 de noviembre que deriva en diferentes normativas nacionales y autonómicas. A su vez debemos de cumplir las diferentes resoluciones ambientales dictadas por las consejerías de Medio Ambiente de cada comunidad autónoma.
Para operar hornos crematorios desde el punto de vista de prevención de riesgos laborales la legislación exige el cumplimiento Real Decreto 1215/1997, de 18 de julio, por el que la empresa fabricante del horno debe de dar la formación específica de su equipo y aportar el manual de uso, mantenimiento y determinar los riesgos laborales. Además, es importante cursar el módulo formativo de operador de hornos crematorios que se encuentra en el certificado de profesionalidad de servicios funerarios.
¿Cómo aborda IDETER la sostenibilidad y la eficiencia energética en la fabricación de hornos crematorios?
La implantación hace dos años de un Sistema de Gestión Ambiental de acuerdo con la norma UNE-EN ISO 14001 nos ofreció la posibilidad de sistematizar, de manera sencilla, los aspectos ambientales que se generan en cada una de las actividades que desarrollamos, además de promover la protección ambiental y la prevención de la contaminación desde un punto de vista de equilibrio con los aspectos socioeconómicos. Esta apuesta por la sostenibilidad hoy viene avalada por nuestro Certificado AENOR de Sistemas de Gestión Ambiental.
Y si hablamos de calidad, ¿qué medidas toma la empresa para garantizarla en todos los hornos que produce?
Nuestra apuesta por la calidad viene avalada por El Certificado AENOR de Sistemas de Gestión de la Calidad y el Certificado IQNet, pasaporte para un acceso internacional de su certificación. Esto asegura a nuestros clientes la gestión de la calidad en IDETER, nuestra clara orientación a su satisfacción y al enfoque hacia la mejora continua.
¿Cómo ha sido la acogida en el mercado del modelo H-2135 con una capacidad de cremación 10/24h?
En IDETER estamos siempre atentos a las necesidades del sector funerario, por ello no paramos de innovar. Este modelo está en servicio desde hace dos años con excelentes resultados, y por ello lo hemos presentado en Funermostra, donde causó mucha expectación e interés de las empresas funerarias asistentes a la feria.
Los clientes cada vez demandan hornos de mayor capacidad para atender grandes centros urbanos, y estos equipos no solo tienen que cumplir las exigentes condiciones ambientales referidas anteriormente sino también las empresariales, en cuanto a durabilidad, consumos energéticos o control y comunicación. En todos estos aspectos clave sabemos y estamos muy orgullosos del rendimiento de modelo H-2135.
¿Qué valores diría que guían el trabajo de IDETER?
Formamos parte de una familia con gran tradición comercial e industrial, por lo que conservamos unos valores inculcados por nuestros ascendientes. Valores como la honestidad, el afán de superación, la vocación de servicio o el compromiso socioeconómico con nuestro entorno.
¿Cuáles son las tendencias o innovaciones recientes en la fabricación de hornos crematorios?
La tendencia es consecuencia de la cada vez más exigente regulación administrativa.
Para los hornos de alta capacidad, donde la ley exige sistemas de filtración de los gases emitidos a la atmósfera, tenemos desarrollados los sistemas de filtración más eficientes del mercado, los cuales son diseñados uno a uno en función de los espacios disponibles.
En cuanto a los hornos de baja capacidad, también se prevé una bajada de límites de emisión. Algunas comunidades autónomas ya la aplican, como es el caso de Murcia. Es para nosotros un orgullo haber sabido adelantarnos a esta bajada de límites y contar con equipos cumpliendo los nuevos requisitos administrativos.
Además, la cremación de mascotas está creciendo en todo el país. ¿Cómo está dando soluciones IDETER a esta necesidad?
En efecto, el mercado de hornos de cremación de mascotas está creciendo muy rápidamente en España, donde ha pasado de ser un servicio con instalaciones básicas y hornos poco especializados a contar con edificaciones de calidad e instalaciones muy cuidadas. Se busca ofrecer un servicio funerario lo más completo posible, lo que incluye espacios equivalentes a los de un tanatorio al uso.
Por ello, nuestros diseños van en la misma dirección y nuestros hornos, tanto estética como funcionalmente son réplicas a escala de sus homólogos en seres humanos. Incorporamos sistemas de introducción automáticos y los mismos controles de calidad ambiental.
¿Cómo es la relación de IDETER con las funerarias? ¿Qué servicios de apoyo les ofrece?
Nuestra relación es directa, asesoramos y colaboramos con el equipo técnico y de dirección de obra de nuestros clientes y les acompañamos durante todo el proceso administrativo y de adecuación a la normativa del proyecto de obra civil.
Disponemos además de personal experto en reglamentación ambiental capacitado para tramitar la implantación de la actividad de cremación en toda España. Asimismo, el mantenimiento de los hornos es crucial para mantener su eficiencia y que su vida útil sea la máxima posible, nuestros contratos de mantenimiento preventivo son el instrumento con el que conseguimos adelantarnos a los problemas, dándole al mismo tiempo tranquilidad a nuestros clientes
¿Cuáles diría que son las mayores preocupaciones de los funerarios en cuanto a los hornos hoy en día?
Sin duda, la eficiencia energética y el respeto al medio ambiente.
Y en lo que al futuro respecta, ¿cuál es su visión sobre la industria de hornos crematorios y la cremación en general?
Desde IDETER afrontamos el futuro con mucho optimismo. Somos firmes defensores de los servicios de proximidad. A las familias no hay que añadirles más sufrimiento obligándolas a desplazarse a poblaciones distantes para estar presentes en la despedida antes de la incineración. En este sentido, apoyamos las iniciativas de inversión que las empresas funerarias hacen en pro de acercar el servicio.
El sector público ha delegado mayoritariamente esta actividad a la inversión privada, donde las empresas funerarias, dentro del cumplimiento de la legalidad administrativa, organizan sus inversiones con los criterios que entienden más oportunos. Sin embargo, la instalación de estos equipos no tiene que obedecer necesariamente criterios económicos, conozco grandes profesionales funerarios con vocación de servicio que no han dudado en invertir su dinero en la instalación de un horno con todas las obligaciones que conlleva solo por dar servicio a su comunidad.
La cremación está en nuestra cultura celta, ibera y romana, la teníamos olvidada pero cada vez es más demandada, tiene connotaciones místicas que no nos son extrañas. Por todo ello, entendemos que la cremación tiene un gran futuro.