La psicóloga y tanatóloga repasará en una webinar la importancia de los trabajadores funerarios en la gestión de un buen duelo por parte de las familias
Iliana Aguirre, psicóloga y tanatóloga, ofrecerá el próximo lunes una webinar exclusiva para los socios de AESPROF. En ella, la experta explicará algunas pautas que los trabajadores funerarios podrán aplicar en su día a día. Y es que a nadie se le escapa que el día a día en una funeraria poco tiene que ver con el común de los trabajos. Lidiar con el dolor de las familias puede llegar a afectar a estos profesionales.
Por eso, aprender a gestionar emociones propias y ajenas, así como identificar las distintas necesidades de la familia, es primordial. “Hay que entender que un duelo es un proceso en el que hay varias etapas y que hay que pasar por todas ellas”, explica Aguirre, que centrará su intervención en el duelo por la pérdida de los padres.
“El duelo de un buen padre o una buena madre, quienes han sembrado amor en sus hijos, es muy significativo, y debemos saber empatizar con ellos. Ayudarles durante rituales como la velación o el entierro, estar pendiente de lo que se necesite, es una carga menos que deben sostener en esos momentos delicados. Es como decir, no te conozco, pero estoy ahí y te acompaño en este proceso”.
Empatizar y acompañar: los pilares del trabajo con la familia
Lo primordial, destaca la profesional, es saber empatizar y acompañar a la familia. “Cuando alguien está pasando por esa situación está en shock. Y de alguna manera, en el funeral, son los hijos los anfitriones, pero por motivos evidentes no pueden poner atención en todo el mundo, porque están inmersos en un dolor muy fuerte. Los trabajadores funerarios pueden convertirse en su gran apoyo para gestionar este momento”.
Aunque no seamos conscientes, todo lo que se sucede durante estas horas repercute más tarde en el duelo de la propia persona. “He tenido pacientes con ese “alivio” de tener un estrés menos, de haberlo tenido todo preparado, tener un gran acompañamiento por parte del servicio funerario, y se nota mucho en ellos y en cómo llevan después su duelo”.
Todos esos detalles son relevantes, algo que Iliana tiene muy presente. “Con Ángel (AESPROF) empecé a darme cada vez más cuenta de todo esto, y también, claro, durante mi preparación como psicóloga y tanatóloga. Empecé a investigar sobre lo que los funerarios hacen y debo decir que guardo una gran admiración por todos ellos”.
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