«Quédate en casa o baila con nosotros». Se han convertido en los trabajadores funerarios más famosos del mundo durante la pandemia del coronavirus y han querido aprovechar su popularidad para lanzar un mensaje de apoyo en la lucha contra la expansión de la COVID-19. Los africanos que cargan ataúdes en los ritos que han arrasado en internet, de este modo, animan a la población a cumplir con las normas del confinamiento y agradecido el esfuerzo de todos los sanitarios.
Apoyados en el humor que se ha nutrido de sus vídeos y el amplio conocimiento que han alcanzado en las últimas semanas, han querido poner su granito de arena y contribuir a frenar los contagios que se multiplican por todo el mundo.
Una historia previa al coronavirus: 320 euros por cargar un cadáver bailando en Ghana
Como viral del momento y de que sus imágenes bailando mientras cargan ataúdes se convirtiesen en tendencia, estos trabajadores ghaneses han ido apareciendo en diversos medios de comunicación. Esto les ha permitido explicar que el rito que protagonizan es una forma de despedir a los seres queridos creada por Benjamin Aidoo en 2003. Se ofrece con un coste aproximado de unos 320 euros. El precio final, no obstante, depende de varios factores, como el tipo de indumentaria que llevan los cargadores.
Con todo, el equipo de Benajamin Aidoo, ofrece servicios a la carta y a medida del cliente, que es quien decide si quiere un funeral tradicional o prefiere una danza fúnebre. Esta fórmula ha tenido tanto éxito que se ha convertido un una fuente importante de empleo y ha creado 100 puestos de trabajo.
Este tipo de funerales, de este modo, se han convertido un negocio al alza. Cada vez más familias apuestan por este tipo de despedidas, impulsando una nueva línea corporativa dentro del sector funerario en Ghana.