Los mayores perjudicados del IVA funerario (21%) son los ciudadanos españoles, aunque afecta de forma directa a funerarias y aseguradoras
Los fallecimientos llenan titulares durante estos días, así como el servicio funerario (e IVA) que los acompaña. Los ciudadanos se enfrentan a situaciones dramáticas con el problema agravado de un parón de la economía española.
Son tiempos de servicios esenciales y de tarifas ajustadas. Son tiempos en los que se vuelve a poner de manifiesto la paradoja de que se pague menos IVA por una reserva de hotel (10%) que por una reserva de sala en un tanatorio (21%). ¿Qué es más esencial?
Hasta 500 euros de sobrecoste para las familias
Desde que se cambiara el IVA del 8% al 21% en 2012, la Asociación Nacional de Servicios Funerarios (Panasef) ha registrado un incremento del coste de los servicios de entre 300 y 500 euros para los ciudadanos.
Ironías de la muerte
Algunos de los servicios a los que se aplica un IVA inferior al de un trabajo funerario (21%):
Viajes en transporte público (10%)
< Transporte en coche fúnebre (21%)
Reserva de hoteles (10%)
< Reserva de velatorios (21%)
Práctica sanitaria en España (0%)
< Práctica sanitaria dentro de un tanatorio español (21%)
Panasef lleva años pidiendo al gobierno una bajada del IVA, para un sector por el que el Estado «recauda 300 millones de euros». Siempre han puesto de manifiesto las incoherencias en comparación con otros ámbito.
España, en el top del IVA funerario en Europa
Países como Reino Unido, Italia o Portugal no aplican IVA directamente a los servicios funerarios, como recoge un informe de la Universidad Pompeu Fabra (2017).
Sin embargo, España se encuentra entre los que más cargan este impuesto, superado por Grecia (23%), Croacia (25%) y Hungría (27%).