Una tragedia seguida de otra. Se reunieron para despedir a un ser querido que había sido asesinado días atrás. Y el encuentro acabó en tiroteo y con varias personas heridas camino del hospital.
Trece personas recibieron disparos en un funeral que este fin de semana tuvo lugar en Estados Unidos, tal y como han confirmado las fuerzas de seguridad. Por el momento, no se conoce información sobre quien pudo realizar los disparos ni se han revelado tampoco las identidades de las víctimas.
Encontrado muerto en su coche
Tal y como explicó el propio Departamento de Policía de Bogalusa (Lousiana), fue pasadas las nueve de la noches del sábado 16 de mayo cuando tuvieron lugar los hechos. Tras recibir varias llamadas que ya detallaban que algunas personas habían sido heridas en un tiroteo y necesitaban asistencia médica, los agentes se desplazaron a la escena del incidente. Allí observaron una aglomeración de gente en lo que había sido el funeral de Dominique James, aparecido asesinado recientemente. La víctima, cuya desaparición había sido denunciada, apareció muerto en su propio coche el 8 de mayo tal y como relatan los medios estadounidenses.
Las fuerzas de seguridad pidieron refuerzos y lograron asegurar la escena, en la que se encontraban heridas 13 personas, una de ellas en situación crítica.
Sin testigos
A pesar de la gran cantidad de gente que se encontraba en la zona, tal y como refleja la Policía en su informe, ningún testigo ha dado hasta el momento el paso al frente para dar algún tipo de información sobre el suceso a los agentes. De esta forma, la investigación sigue adelante, al igual que la recuperación de los heridos, pero sin ningún tipo de colaboración ciudadana.